Decisiones Espirituales

Pasos Audaces en esta semana

“Lot levantó la vista y observó que todo el valle del Jordán era tierra de regadío, como el jardín del SEÑOR o como la tierra de Egipto en dirección a Zoar. Así era antes de que el SEÑOR destruyera a Sodoma y a Gomorra.” (Génesis 13:10).

Crecí en un pequeño pueblo al norte de España con casas de piedra, caminos estrechos, una escuela de una sola sala y vecinos amigables. En ese lugar, mis padres eran misioneros. A los 17 años, dejé el único hogar que había conocido para asistir al Instituto Bíblico Moody, aquí en Chicago. Esa gran ciudad norteamericana estaba muy lejos de ser el pueblito de 200 habitantes en el que crecí. No hace falta decir que me sentí abrumado por el tremendo choque cultural y me preguntaba si había tomado la decisión correcta. 

Desde entonces, he aprendido que las decisiones que se basan únicamente en lo aparente tienen consecuencias espirituales indeseadas. En mi caso, necesitaba fijar mis ojos en Cristo; no en lo que me rodeaba. Si lo hubiera hecho, habría fracasado y regresado a casa. La fe implica confiar en lo que aún no podemos ver o comprender completamente. Es como cruzar un puente en la niebla y no ver el final, pero sabemos que llegaremos al otro lado. Esa decisión inicial de dar un paso adelante a menudo comienza al recordar las promesas de Dios y Su Palabra. 

Siempre me ha llamado la atención que Abraham haya sido la única persona en la Biblia conocida como “amigo de Dios”. No fue perfecto en su caminar con el Señor, pero a lo largo de su vida demostró actuar en fe cuando dejó a su familia en Harán y viajó a tierras desconocidas. Abraham y Sara aprendieron en su viaje que podían confiar en Dios durante todo el proceso. Se aferraron a la palabra de Dios y confiaron en Él. Y es que la toma de decisiones espirituales requiere que primero creamos y luego obedezcamos. 

Cuando te enfrentes a una decisión en tu vida, no te sorprendas si las distracciones, las dudas e incluso los compromisos buscan nublar tu visión espiritual. 

Para ayudarte, permíteme ofrecerte tres enclaves que descubrí hace algún tiempo y me han ayudado a mantener mi fe en Dios: 

• Persevera: Fija los ojos en Jesucristo, el fiel autor y perfeccionador de nuestra fe cuyas promesas son inquebrantables.

• Ora y lee las Escrituras: Busca a Dios regularmente a través de la oración y dedica tiempo a Su Palabra. Imagina que es como limpiar la humedad del parabrisas.

• Comparte: Vive en comunidad. Rodéate de compañeros, creyentes como tú, que te animen y ayuden a crecer espiritualmente. 

Los planes de Dios para nosotros son buenos incluso cuando las circunstancias no lo son. ¡No permitas que la niebla de la incertidumbre cambie tu destino espiritual! Podemos confiar en que Dios está obrando detrás de escena y acomoda todo perfectamente en su lugar. Deseo, de todo corazón, que tu camino de fe esté guiado por la sabiduría, la oración, la adoración y la búsqueda de Dios, por encima de cualquier cosa. 

Para más Pasos Audaces, visita este enlace. 

Información sobre el ministerio de Mark

Este verano, tuve la oportunidad de enseñar en The Global Proclamation Academy del Seminario Teológico de Dallas. En mis clases participaron jóvenes pastores y líderes eclesiales de 27 países, entre ellas Pakistán, Malawi, Argentina, Madagascar, Indonesia, Malasia y Brasil. Fue una experiencia maravillosa.

Fue enriquecedor observar que la mayoría de los desafíos personales que enfrentan los pastores jóvenes son los mismos en cualquier lugar del mundo, ya sea Jamaica, Camboya o Estados Unidos. Sin embargo, Dios se está moviendo poderosamente. Ya está forjando la próxima generación de pastores que liderarán la Iglesia de Cristo en tiempos turbulentos, pero de gran oportunidad y esperanza.

¡Dona Ahora!